Gracias a este estudio, podemos afirmar que el miedo no solo procede de
nuestras experiencias o posibles traumas de la niñez, si no que también podrían
estar influenciados en gran parte por las situaciones vividas por nuestros
antepasados; Con esto podemos afirmar
que todos tenemos miedos preconcebidos con los que debemos luchar a través de
nuestra vida, solo depende de nosotros que la lista de miedos aumente o
disminuya.
En nuestros genes están los miedos más naturales, los miedos que nos
hubieran salvado la vida en el pasado y que ahora gracias a tanta tecnología y
avances en seguridad, no son tan necesarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario